Existen diferentes tipos de crédito, y las opciones varían respecto al plazo del crédito, a la institución financiera y a la finalidad del crédito.
Tener acceso y saber utilizar un crédito es fundamental para la vida diaria. Es probable que ya utilices un crédito, ya sea a través de una tarjeta o de un préstamo.
Aprender sobre esta poderosa herramienta permite utilizarla y ganar en calidad de vida. El crédito, en las mejores condiciones posibles, puede ser el camino para alcanzar tus metas o puede ser de gran ayuda en momentos difíciles o ante un imprevisto. El crédito bien utilizado puede llegar a hacer realidad un sueño que parecía inalcanzable.
Te presentamos algunos tipos de crédito que existen en el mercado:
Créditos de nómina. Lo único que necesitas es que tu sueldo te lo depositen en una cuenta bancaria y a través de ésta se te hacen los descuentos mensuales o quincenales. Tienen la ventaja de que no te cobran comisiones excesivas debido a que no hay forma de que se te pase la fecha de pago, pues el descuento se hace de forma automática. Para este tipo de créditos, los requisitos son menores.
Tarjetas de crédito. Son útiles para adquisiciones a corto plazo. La principal ventaja de una tarjeta de crédito es la temporalidad, ya que te permite disponer de dinero que no tienes al momento pero que vas a recibir en un futuro inmediato.
Tarjetas departamentales. Son otra variante de la tarjeta de crédito, con la diferencia de que son ofrecidas por almacenes o tiendas y sólo pueden ser utilizadas para compras en sus establecimientos. Antes de solicitar alguna tarjeta siempre revises el Costo Anual Total, anualidad, comisiones, promociones y beneficios, así como todos los términos y condiciones.
Préstamos personales. Se caracterizan por ser créditos abiertos que no están anclados a un fin específico. Esto significa que al solicitarlo no debes explicar en qué lo utilizarás y además puedes fragmentarlo en distintos objetivos. Asegúrate de que al solicitarlo sea con una empresa seria y revisa las estipulaciones de tu contrato antes de firmar. También elabora tu presupuesto y verifica tu capacidad de pago.
Créditos específicos. Muchas instituciones ofrecen financiamientos especializados, por ejemplo, hipotecarios, educativos y automotrices, entre otros. Esto significa que la cantidad que te ofrezcan podrá ser utilizada únicamente en un objetivo y deberás poder comprobar que lo destinaste a ese fin. La ventaja de estos créditos es precisamente su especialización, ya que los montos y los planes de pago están diseñados de acuerdo al objetivo.
Préstamo ABCD (Adquisición de Bienes de Consumo Duradero). La utilidad de este crédito está relacionado a la adquisición de bienes que tienen un valor comercial y una vida útil determinada, como son los automóviles, equipo de cómputo, electrodomésticos, mobiliario y equipo. Se otorgan para complementar el faltante para adquirirlos, es decir, el acreditado deberá aportar un porcentaje del costo total y el banco le presta el restante. Estos bienes en ocasiones pueden servir como garantía del préstamo.
En Kondinero ofrecemos crédito de nómina, para el cual no necesitas aval ni garantía, además de que podrás utilizarlo para cubrir cualquier imprevisto o darte el gusto que quieras.
Fuente: UNAM, Consumo responsable, Profeco.