Si llegara a haber alguna crisis financiera en la familia es importante que los hijos estén enterados de todo lo que pasa para incluso hacerlos partícipes de la situación.
Cuando hay inestabilidad financiera y es necesario reducir gastos, los padres de familia se sienten agobiados ante la necesidad de negar cosas o “satisfactores” a su familia. Estos “satisfactores” van desde necesidades superfluas como la compra de juguetes o fiestas de cumpleaños, hasta otras más importantes como escuela, ropa, calzado o hasta alimentos.
En muchas ocaciones el agobio de los padres por resolver los problemas financieros, les hace dejar de lado las necesidades emocionales de la familia. Los niños pueden no entender de economía, pero perciben las preocupaciones de los adultos, por lo que si no se les explica de manera adecuada, tienden a magnificar los problemas y a hacerlos propios, lo cual, se ha comprobado en estudios psicológicos puede dejar marcas de inseguridad y frustración en la vida adulta.
De ahí la importancia de hablar con ellos sobre el momento que se está pasando y lo que sucederá en su entorno. A continuación unos consejos de cómo hablar con tus hijos:
Hablar con la verdad. Los niños y adolescentes son muy perceptivos y saben cuando se les trata de ocultar algo. Debes pensar en una explicación apropiada a su edad y capacidad de comprensión. Es importante que al explicarles los hechos, los tranquilices diciendo que van a poder superar el problema y que lo más importante es estar siempre unidos. Si por ejemplo, perdiste tu empleo o tendrán que cambiarse de casa, lo mejor es decirlo claramente, tarde o temprano lo sabrán y es mejor que lo sepan por ti.
Hazlos partícipes. La crisis económica puede ser un buen momento para inculcar planeación financiera en tu familia. Puedes pedirles ayuda para reducir gastos y planificar la economía familiar. Tus hijos pueden elaborar una lista de las cosas que tienen, las que desean y juntos pueden decidir qué es prioritario y lo que no lo es.
Trata de no discutir con tu pareja. La inestabilidad económica puede llevar a conflictos de pareja, pero es importante que los padres traten de cuidar su relación y no discutir, en especial frente a los hijos. Es importante que ambos se pongan de acuerdo sobre lo que van a decirle a los hijos antes de hablar con ellos.
Mantén la comunicación en todo momento. Es importante que preguntes a tus hijos qué es lo que ellos sienten y saben, y preguntarles sobre qué piensan sobre los cambios que se están generando en su vida.
Encuentra actividades familiares de bajo costo. Muchas de las actividades que más divierten a los niños son gratuitas. Al principio quizá les moleste que dejarán de ir a actividades o clases después de la escuela, o no podrán comprar un videojuego que desean, o dejar de ir a comprar pizza, pero si les explicas adecuadamente la razón de estos cambios, y les ofrecen alternativas de diversión más baratas, atractivas y emocionantes, lo más seguro es que se adapten sin problema y lo acepten.
En Kondinero sabemos lo importante que es mantener la comunicación con la familia, y en una crisis es fundamental para evitar dañar la relación y mantenerse unidos.
Fuente: Finanzas prácticas, Condusef, caps, El País.