En algún momento de nuestra vida hemos necesitado de un crédito adicional para resolver alguna emergencia, comprar o invertir en algo. Entre las tantas formas de préstamo destaca el refinanciamiento o recompra. ¿Cuándo usar uno u otro? Averígualo a continuación.
Beneficios refinanciar
Si tienes un crédito, esta modalidad de nuevo préstamo hace que sobre ese mismo te presten más, es decir, es una ampliación de tu línea crédito casi siempre bajo las mismas condiciones, esa es una de sus principales ventajas. Al autorizarse y reprogramar deuda, una parte servirá para pagar lo que ya debías anteriormente y el resto puedes usarlo en lo que necesites.
¿Cuáles son las razones de refinanciar? Cuando requieras de un “empujón” o más dinero para terminar de pagar la penúltima y última mensualidad de la hipoteca, del auto, atender algún imprevisto de salud, deuda o financiar algo que quieres.
La clave para solicitar refinanciación es que como titular de la cuenta estés al corriente con tus pagos y que tengas cierto porcentaje pagado de tu primer préstamo.
Recompra
Si ya tienes un crédito con alguna institución financiera puedes solicitar con ellos mismos la recompra, que es un préstamo nuevo, independiente al que ya tenías. Para acceder a él, también debes estar al corriente en tus pagos.
De esta forma es más probable que esté preautorizado o preaprobado. Una vez recibidos los recursos tendrás la opción de hacer tu primer pago meses después de haberlo cobrado. Esa es una de sus principales ventajas.
¿Cuándo solicitarla?
Esta opción te ofrece beneficios como obtener los recursos que necesitas al momento y pagarlos cuando ya estés más solvente: por ejemplo, si necesitas un préstamo, pero recibirás algún bono o recursos meses después, es bueno aprovechar esta oferta de recompra, pues no tendrás problemas de pagar a tiempo y sin demora. Esto conservará la buena calificación en tu historial crediticio y evitarás ser deudor moroso.
Como ves, tener un préstamo no es limitante para solicitar otro mientras tu pagos sean puntuales, como parte de una buena educación financiera y finanzas personales sanas.
¿Sabías que la mayoría de los solicitantes de crédito lo hacen para cubrir gastos corrientes como comida, personales o de servicios, pero también para atender emergencias e imprevistos. Sin embargo, también son usados para comprar, reparar o ampliar una casa, comprar vehículos, entre otras opciones de consumo inteligente, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2018. ¿Tú para qué lo necesitas?
No importa si viste más ventajas refinanciamiento sobre la recompra (o viceversa), te invitamos a comparar y elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.
Kondinero desea apoyarte en el momento que más lo creas conveniente mediante el refinanciamiento, disponible para sindicalizados del sector educativo, salud, gobierno, jubilados y pensionados, y la recompra para sindicalizados del sector educativo. Es importante que estés al corriente en tus pagos para tener mayores posibilidades de una oferta disponible.
Para saber si tienes una preautorización ingresa tu Registro Federal de Contribuyentes (RFC) con homoclave en las siguientes ligas:
Una vez que hayas comprobado que tienes una oferta disponible sólo revisa y firma una solicitud prellenada que tendrás disponible. También deberás presentar otros requisitos adicionales como una identificación oficial vigente y un documento adicional (en el caso de que el banco donde depositen los recursos así lo requiera). Tendrás el monto crédito en un máximo de 48 horas.
En Kondinero no tienes que preocuparte por la puntualidad del pago mensual, quincenal o semanal, pues recuerda que estos se descuentan automáticamente de tu nómina. Para más información llámanos al 01800 700 9000 o visita nuestra página de internet.
¡Kondinero… soluciona tu vida!