Si la dueña de tus quincenas es la renta algo estás haciendo mal, por mucho que te guste un lugar debes hacer cuentas para poder vivir tranquilo.
El tráfico diario de las horas pico, la carga de trabajo e incluso los cambios en el estilo de vida, como el matrimonio o el nacimiento de un hijo, pueden ser el detonante para buscar una nueva casa.
El primer impulso es ver los clasificados y tratar de encontrar un espacio que se adapte a tus necesidades y presupuesto, pero suele suceder que una vez en tu nuevo hogar, descubres que estás pagando más de lo que realmente puedes.
La renta es a menudo la parte más importante al administrar el gasto mensual de una persona, y determinar cuánto debes gastar en el alquiler puede ser complicado.
Alejandro Zamora, investigador de contenidos de economía y finanzas del Museo Interactivo de Economía (MIDE), recomienda que, antes de firmar un contrato de alquiler de una casa o departamento, el interesado debe analizar sus necesidades, pues quizá si eres soltero no requieres un lugar con tres recámaras y una cocina enorme.
Lo primero que debes saber es que no existe una medida 100% exacta, que sea correcta y que haga que el resto de porcentajes sean erróneos. En su defecto, hay una serie de circunstancias y prioridades que te llevarán a dar con la cantidad de tus ingresos que es conveniente que destines a pagar la renta.
Está claro que gastar el 70% de tu salario en la vivienda puede dejarte sin margen de maniobra simplemente para vivir, pero también que hay un porcentaje totalmente asumible para la mayoría de personas y familias.
¿Cuánto puedo pagar? Lo primero que hay que hacer para determinar la cantidad de dinero que debes gastar en renta es saber cuánto puedes pagar realmente. Una regla general es que no debes gastar más del 30% de tus ingresos en la renta. La cantidad exacta que puedes permitirte dependerá del monto en el pago de deudas y servicios. También debes considerar si los servicios están incluidos en el precio. Lo primero es anotar todos tus gastos, y luego ver lo que queda.
La regla del 50/30/20 no es más que una fórmula para distribuir tu presupuesto creada por la política y académica estadounidense Elizabeth Warren y que plasmó en su libro “All Your Worth: The Ultimate Lifetime Money Plan”. Según la autora, un 50% de los ingresos debería estar destinado a los gastos fijos, un 30% a los gastos de elección personal y el ocio y un 20% conseguir tus metas financieras, dicho de otra forma, a la inversión, planeación y ahorro.
El alquiler formaría parte del 50% de los gastos fijos, impuestos que se conocen de un año para otro, seguro de vida, préstamos y créditos e incluso la compra en el supermercado. El porcentaje concreto que destinar a vivienda está ya abierto.
Con esta distribución la autora asegura que también hay un porcentaje que estará directamente relacionado con el ocio y las elecciones personales como el pago de internet, la tarifa de celular si es más cara que la normal y cuestiones que tienen más que ver con el estilo de vida.
Sobre la base de esta distribución se han ido creando otras reglas como la de 50/25/25 o la del 40/30/30, por poner dos ejemplos.
Para que lo entiendas mejor, si para ti vivir en cierta zona o tener una casa o departamento luminoso es clave y para lograrlo estás dispuesto a renunciar a otros gastos, perfecto.
En Kondinero te recomendamos encontrar el equilibrio en tu vida, y tus gastos, por lo que en cualquier momento que necesites ayuda, siempre estaremos ahí para ti. Puedes acercarte a nuestros asesores.
Fuente: Wall Street Cheat Sheet, financialred, terra.