Comer bien y hacer ejercicio hoy se plantea como hábitos esenciales para fortalecer la salud y afrontar la nueva normalidad; esto con el fin de reducir el riesgo de contraer enfermedades y dolencias, además de aumentar la inmunidad.
Ante la situación actual, 73% de los consumidores menciona que planea comer y beber de manera más saludable, señala la investigación de FMCG Gurus, sin embargo ¿qué es una buena alimentación o qué alimentos me ayudan a fortalecer mi salud?
Una buena alimentación
Existen distintos puntos de vista sobre lo que es comer bien, ya que depende de elementos como la disponibilidad de los alimentos, los precios, los gustos, sabores, apariencia e inclusos factores culturales.
Sin embargo, de manera general se puede considerar la siguiente información para preparar tus alimentos y cuidarte desde casa:
- Evita o disminuye el uso de sal, diversifica los condimentos o juega con las combinaciones para crear nuevos sabores y evitar la sal.
- Calendariza las verduras y frutas por temporada y procura comerlas de acuerdo a estas fechas para aprovechar mejor su contenido nutricional y conseguirlas a buen precio, además de que tendrán mejor sabor.
- Procura consumir frescos los alimentos para mantener sus nutrientes.
- Recuerda, al vapor es mejor que hervido, y hervido es mejor que frito, no sólo por disminuir las grasas; cocinar las cosas al vapor evita la pérdida de nutrientes.
- Lava y desinfecta los alimentos con cuidado para retirar la suciedad y prevenir infecciones o incluso intoxicaciones por pesticidas.
- Aumenta el consumo de alimentos con vitamina C, como son los cítricos, tomates y hortalizas de hoja verde.
- Toma mucha agua, ya que te ayuda a conducir los nutrientes por todo tu cuerpo, regular la mayoría de los procesos en tu organismo, lubricar tus ojos, amortiguar las articulaciones e incluso a eliminar mejor los desechos.
Factores como la edad, el género, tu rutina y la actividad física que realizas es necesario analizar para determinar cómo alimentarte sanamente. Si no te sientes seguro de que tu alimentación sea la mejor, puedes acudir con un nutriólogo y establecer un plan alimenticio. Tienes que empezar a invertir en tu salud para descubrir los grandes beneficios.
Actividad física
Decir que no tienes tiempo de hacer ejercicio puede que continúe siendo un pretexto en la nueva normalidad, sin embargo, muchas personas al trabajar en casa ahora cuentan con los tiempos de traslados para aprovecharlos en hacer actividad física.
Además, en promedio las personas han disminuido su movilidad en un 70%, lo que ha contribuido a que sus niveles de estrés aumenten y afecten su salud.
Hacer ejercicio contribuye a mejorar los procesos físicos de tu cuerpo, previene enfermedades cardiovasculares, mejora la capacidad mental, reduce el estrés y mejora el ánimo.
Busca aplicaciones, inscríbete a grupos en línea, o compra equipo deportivo para sentirte lo más cómodo posible, lo importante es activar y fortalecer tu salud.
Salud mental
Presta atención a tus estados de ánimo, la ansiedad y el estrés producto del encierro puede conducir a fuertes depresiones que alteren tu estado físico y mental.
No tener ánimo de hacer las cosas afectará a toda acción de bienestar que puedas implementar para mejorar tu salud, por ello no debes pasar por alto ningún factor de riesgo.
Autoanalízate:
- ¿Me enojo con facilidad?
- ¿Me cuesta dormir bien?
- ¿Estoy demasiado sensible?
Platica lo que sientes, y si es necesario consulta con un profesional para atender tu estado de ánimo y encontrar una solución.
Gastar tiempo y dinero en mejorar tu salud, no es un gasto, es una inversión que no sólo te protege a ti, sino a todas las personas que te rodean, aplica mejores medidas preventivas y enfrenta sin temor el retorno a la nueva normalidad.